Redtel, la asociación que engloba a los principales operadores de Internet (Telefónica, Vodafone, Ono y Orange), lo tiene claro. Es al Gobierno, y no a las compañías de acceso ni a la industria audiovisual -las dos partes en conflicto-, a quien corresponde regular las descargas en Internet.
Redtel rechaza también la última propuesta de la Coalición de reducir la velocidad de acceso a los internautas que descarguen archivos protegidos por derechos de autor, porque es "inviable técnicamente", y además resultaría inútil para frenar las descargas de música.