TomTom, la mayor empresa de aparatos de navegación GPS, ya anunció ayer que espera que los precios de los navegadores continúen cayendo en el tercer trimestre –han bajado un 9% en el último- y sus acciones se desplomaron ayer un 21% el la bolsa de Ámsterdam, un récord en la historia de la compañía.
A los problemas económicos por la caída de las ventas y de los precios de la compañía, que ya ha reducido un 11% su plantilla este año, se le suma ahora la presencia de un nuevo y duro competidor: Google. Por su parte, Garmin, el mayor fabricante estadounidense de este tipo de productos, se dejó más de un 16% en el mercado bursátil neoyorkino.
Su navegador para el móvil, llamado Google Maps Navigation, es una ampliación del servicio de mapas Google Maps que proporciona direcciones con audio al automovilista, una función que había sido demandada por muchos usuarios.
Google Maps Navigation es sencillo y funcional y de momento se podrá utilizar en Estados Unidos en móviles Droid Motorota que utilicen el sistema operativo de Google Android 2.0, según informa la compañía en su blog. Sobre la gratuidad del producto, el consejero delegado de la compañía, Eric Schmidt, ha dicho que a ellos les “gusta la gratuidad, porque al cliente le gusta también”. TomTom también fabrica una aplicación de navegación para el iPhone que cuesta 99,99 dólares (unos 67 euros) en Estados Unidos.
El nuevo producto de Google ofrece algunas ventajas sobre los tradicionales móviles que ofrecían la posibilidad de funcionar como GPS, la más importante es que no requiere el uso de un software específico. El gigante de Mountain View ofrece los mapas de Google Maps. Su producto permite búsquedas no sólo por direcciones postales, sino también por negocios o cualquier monumento o edificio conocido. También incorpora el famoso Street View (fotografías de las calles) y el servicio de voz, para evitar tener que teclear en el teléfono las indicaciones. Además proporciona información actualizada sobre el tráfico.